jueves, 12 de septiembre de 2024

El último cuento chino, los coches

Lo chino nos invade, nos van convenciendo poco a poco de que no hay más remedio, que todo se fabrica allí, que es lo mismo y de igual calidad. Nos empujan por precio, por necesidad de ajustar nuestras necesidades a nuestra supervivencia económica.

Ya estan hace años en nuestras calles, nos deslumbró que tenían de todo y barato, el "todo a 100", ahí empezó todo, poco a poco nos invadió lo barato, lo rápido de usar y tirar, no importaba que se rompiera a la mínima exigencia, ya no quedan casi tiendas, solo hay "chinos".

Nos invadieron cuando aquí nos contaron que no había microchip, que las materias primas escaseaban, y así, poco a poco llegaron sus coches, los de aquí injustificadamente subieron el precio cantidades exageradas, todo valía, el mercado habia cambiado, pagamos por lo mismo mucho más, y ahi vieron el momento de su última conquista e invasión, sin balas ni soldados, con coches. Los de aquí no necesitan vender más, ganan más vendiendo menos a más precio y con etiqueta premium (Cupra, DS, etc), con eso siguen saciando su voraz apetito de dinero, escandalosos sueldos de directivos, grandes beneficios de filiales y concesionarios.

Esos coches que mucho antes les habíamos enseñado a fabricar, pues nuestra avaricia sin fin buscaba menos costes y más beneficios, llevando nuestra tecnología y nuestra experiencia, pensado ingenuos que jamás despertarían, que no se volvería contra nosotros. Trabajaron y aprendieron, llegó la crisis, esa que cíclicamente nos imponen para que no olvidemos que solo somos simples consumidores, y ellos compraron Volvo, inviertiron en Mercedes, etc., ya estaban dentro.

Ya fábricamos en EEUU, en Rusia, en África, en India, pero China es diferente, ellos no tienen límites, sus guerras son comerciales, no pierden el tiempo, aprenden rápido y trabajan rápido, pero no tienen prisa pues tienen claro su objetivo, invadir.

Ya están aquí, con precios bajos, con marcas muertas pero resucitadas sin alma (MG), con tecnología antigua y barata, sin seguridad ni refinamiento, pero que cumple con nuestro presupuesto de supervivencia.

Ahora ya es decisión tuya.

No hay comentarios:

Publicar un comentario